¿Cómo administrar tu calendario mientras ayuno?

Dr. Bill Bright

La duración del ayuno, el tipo de ayuno que realice y cómo ajuste su agenda dependen principalmente de la flexibilidad de su vida diaria.

Ya sea que trabajes en una oficina o desde tu casa, seas estudiante o ama de casa, existe una manera de gestionar tu ayuno. De hecho, en base a mi experiencia personal, estoy segura de que hay miles de hombres y mujeres, de todas las edades y etapas de la vida, que ya han completado ayunos cortos y prolongados, muchos de hasta 40 días.

Hay personas cuyo trabajo o estilo de vida implica una actividad física extenuante que, aun así, han disfrutado de un ayuno prolongado. Sin embargo, si esta es su situación, es posible que desee considerar un ayuno limitado de solo uno o más días de la semana. O puede considerar los fines de semana como el mejor momento para abstenerse de alimentos. Recuerde también que ayunar durante los días festivos importantes no siempre es una buena idea. Las familias pueden verse incómodas y las tentaciones de comer pueden ser abrumadoras.

Hay un par de razones para considerar ajustar su horario, especialmente durante un ayuno prolongado:

El primero es el físico: Durante el ayuno, es posible que te sientas algo más débil de lo normal. Durante los primeros días, puedes sentirte cansado e irritable. Aligerar tu carga de trabajo y reducir el ejercicio extenuante sería una muy buena idea para mantener tu salud y tu moral.

La segunda razón es espiritual: El ayuno no es simplemente privarse de alimento, sino cambiar las necesidades del cuerpo físico por las del espíritu. Para entrar en una comunión más íntima con Dios y mantener el ayuno hasta el final, será esencial pasar largos períodos de oración y de lectura de la Palabra de Dios. Si durante el ayuno tu vida está llena de actividad y ajetreo, sin pasar tiempo con Dios, morirás de hambre física y espiritualmente. Te sentirás desanimado y frustrado con tu ayuno en lugar de beneficiarte y bendecir. No quiero que eso te suceda.

Cuanto más tiempo pases con Dios en comunión y adoración, y cuanto más leas y medites sobre Su Palabra, mayor será tu eficacia en la oración. Este tipo de atención concentrada hará que tu ayuno sea más significativo. ¡Así que te animo a que organices tu horario en consecuencia!

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