Busca un lugar tranquilo y ponte cómodo. Lee cada sección y reflexiona sobre las preguntas sin prisas, con curiosidad y compasión. Ten a la mano tu diario de devocional para responder cada pregunta.
Comienza con una oración:
"Señor, dame la gracia de saber dónde he estado y dónde estoy ahora."
En las últimas semanas, ¿qué has notado en tu cuerpo?
Examina tu cuerpo. Empieza por la cabeza y ve bajando. ¿Hay algún lugar en el que hayas estado reteniendo tensión? ¿Hombros, mandíbulas? Tal vez hayas tenido molestias estomacales. Anótalos, utiliza las ruedas de emociones y sensaciones corporales para identificar lo que sientes en el cuerpo.
En las últimas 2-4 semanas, ¿cuáles son las principales emociones que has sentido?
Ten en cuenta que muchas personas sólo nombran los pensamientos... Intenta nombrar los sentimientos. Vuelve a la Rueda de emociones y sensaciones corporales para ver si te ayuda a identificar las emociones en función de las sensaciones corporales que hayas notado. Presta atención al miedo, la pena, la ira, la ansiedad, etc.
En las últimas 2-4 semanas, ¿qué ha dominado tus pensamientos?
¿Qué te ha tenido preocupado? ¿Hacia dónde se han desviado tus pensamientos? ¿Qué preguntas o dudas tienes?
Cuando estás en silencio, ¿qué es lo que más anhelas?
No lo juzgues como bueno o malo, simplemente obsérvalo con compasión.
Cuando piensas en tus interacciones con el Señor recientemente, ¿qué has estado experimentando?
¿Cuáles son tus pensamientos y sentimientos hacia Dios? Intenta no juzgarlo, sólo presta atención a lo que es verdad.
Lee despacio tres veces lo que has escrito para cada grupo de preguntas. A medida que lo hagas, resalta o subraya lo que te llame la atención. Escribe lo que observas.
Estad quietos, y conoced que yo soy Dios; Seré exaltado entre las naciones; enaltecido seré en la tierra.11 Jehová de los ejércitos está con nosotros;Nuestro refugio es el Dios de Jacob.
(Salmos 46:10)
Antes de cerrar el ejercicio, escribe tres formas específicas en las que has visto la fidelidad de Dios en las últimas semanas. Esto te ayudará a recordar que, incluso en momentos de confusión o dificultad, Él ha estado presente y obrando en tu vida.
Si este ejercicio ha despertado en ti el deseo de profundizar más en tu relación con Dios o necesitas ayuda para continuar, ¡no estás solo! Escríbenos a través del botón amarillo en pantalla, y con gusto alguien de nuestro equipo te acompañará en este proceso.©2024 Cru. todos los derechos reservados.
