«Vengan, síganme —les dijo Jesús—, y los haré pescadores de hombres». Mateo 4:19 NVI
El llamado de Dios en nuestra vida comienza con una invitación. Jesús cuando empezó su ministerio vió a hombres y mujeres a quienes les pidió que lo siguieran, que fueran con Él a "pescar hombres" y a ayudar a otras personas a reconocer a Jesús como su Señor y su Salvador.
Durante su vida terrenal Jesús vivió con sus discípulos, les mostró su poder, su autoridad, les enseñó a orar, les dijo que vino a servir y dar su vida en rescate por muchos.
Jesús hizo ministerio junto con sus discípulos de forma que ellos podrían emular su compasión, perdón, autoridad y muchas cosas más para que el mundo vea cómo es Dios.
A todos nosotros Jesús nos extiende la misma invitación de seguirlo, de aprender de Él ahora a través de la biblia de como Él amó a la gente, como sirvió a los demás y como enseñó con autoridad.
Jesús te invita a que lo sigas, y mientras de cerca lo haces podrás experimentar una comunión con Dios extraordinaria y podrás ver a Jesús hacer milagros así como sus discípulos lo vieron en persona.
Por tanto, vayan y hagan discípulos de todas las naciones,..." Mateo 28:19a NVI
También el llamado de Dios para todos nosotros es ayudar a cumplir la gran comisión. Jesús nos pide que vayamos y hagamos discípulos, ahora nos toca a nosotros ir y compartir el evangelio con otros, esas buenas noticias que traen gozo, libertad, alegría, que nos dicen que Jesús es nuestro salvador.
A cada uno de nosotros Jesús nos pide que hagamos discípulos, es decir, que la gente no solo escuche o se convierta sino que crezca en fe de tal forma que madure a la imagen de Jesús y pueda hacer lo mismo con otros.
Entonces de una forma sencilla Jesús nos llama a todos a Seguirle y a hacer discípulos. Hay muchas otras cosas que podemos decir pero creo que estas dos son muy fundamentales para nosotros como creyentes.
Un llamado particular.
Pero ¿Cómo puedo saber cuál es el llamado específico para mi vida? o ¿Cómo puedo saber si Dios me está llamando a servirle de tiempo completo?
Sin duda podemos ver en las escrituras que además de ese llamado "general" donde todos los creyentes debemos de obedecer y no solo los "líderes, profesionales, los más espirituales", como amar a Dios, amar al prójimo, hacer discípulos, orar, servir etc.
Pero también podemos ver en las escrituras que Dios llamó a algunos de forma especial para hacer un trabajo único en el extendimiento del reino de Dios.
—¡Ve! —insistió el Señor—, porque ese hombre es mi instrumento escogido para dar a conocer mi nombre tanto a las naciones y a sus reyes como al pueblo de Israel. Hechos 9:15 NVI
Es el caso de Pablo que Dios lo escoge (llama) para llevar el evangelio principalmente a los gentiles (no judíos), Pablo fue escogido para una tarea especial de parte de Dios, y así a muchos más.
Y ahora vemos a Dios llamando a otros a ser pastores, misioneros, plantadores de iglesias, maestros, diáconos en su iglesia local, líderes en su trabajo.
¿Cómo puedo identificar si Dios me está llamando a algo específico?
Ten una relación estrecha con Jesús: si tu relación con Dios es constante, vibrante, podrás estar atento a las cosas que Dios te irá pidiendo, desde las más pequeñas, a las más grandes, hasta las más específicas. Entonces pasa tiempo con Dios diariamente, a través de su palabra, la oración, ayuno, compañerismo con otros creyentes. También pregúntale a Dios donde Él te quiere usar.
Conoce bien tus dones y talentos: Dios te dio a ti dones y talentos con los cuales servir a los demás, como tu iglesia local, tu familia, tus amigos, tus compañeros de escuela o trabajo y tu comunidad. Que identificas bien cuáles son estas cosas que te hacen único y que te gusta hacer para que estés listo cuando una oportunidad se presente.
Sirve en diferentes capacidades: Mientras vas descubriendo tus dones, no esperes para servir. Sirve de diferentes formas ahí donde Dios te puso.
Pide consejo a personas sabias: Pregunta a tus amigos, tus padres, tu pastor, tus líderes, cuales son las cosas que ellos creen en las que tu eres bueno o podrías hacer un gran trabajo. Esto te ayudará a reducir el campo a que quizá Dios te esté llamando.
Busca oportunidades: No siempre a la primera oportunidad identificaremos el llamado específico para nosotros, pero mientras buscas oportunidades estas te ayudarán a identificar mejor tus dones, capacidades y talentos.
Inténtalo: "Para caminar sobre las aguas hay que salir de la barca" Toma pasos de fe y ten confianza en Dios para dar el primer paso en esta aventura de obedecer el llamado de Dios. Verás a Dios actuar de maneras como no lo habías experimentado antes.
Déjame contarte mi historia:
Yo conocí a Jesús como mi Señor y Salvador en mi 3er año de la universidad. Otros estudiantes me compartieron el evangelio y me ayudaron a crecer en mi relación con Dios. Me enseñaron a leer la biblia, me enseñaron cómo ser un discípulo y cómo podría ayudar a otros a conocer a Jesús como su Señor y Salvador. Fue después de unos 2 años, casi terminando con mi carrera universitaria, que le pregunté a Dios "¿Qué quieres que haga cuando termine la universidad?". Aunque no fue una respuesta inmediata o "clara" después de preguntarle a Dios esto de manera constante, en oración, por algunos meses me hicieron la invitación de considerar ser misionero de tiempo completo y dedicar mi vida a ayudar a estudiantes universitarios a conocer a Jesús. Estaba confiado que Dios me estaba pidiendo hacer esto, también mi corazón se emocionaba al soñar como Dios me iba a usar en la vida de estudiantes universitarios. Así que lo intenté, dí el primer paso en el proceso de ser misionero.
Hoy después de 15 años de ser misionero y seguir ayudando a estudiantes universitarios a conocer a Jesús como su Señor y Salvador, mi corazón sigue emocionado por ver a más y más personas venir a conocer a Jesús.
Te animo a que conozcas a Jesús y lo sigas, Él tiene una aventura emocionante para ti.
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