Hacer que vean lo que nosotros vemos, no con nuestros ojos sino con el corazón.
Uno de los textos que viene a mi corazón cuando se habla de compartir la visión es este fragmento en el libro de reyes.
15El siervo de Eliseo se levantó esa mañana. Al salir de la casa, vio un ejército rodeando la ciudad con caballos y carros.
El siervo le dijo a Eliseo: —¿Qué vamos a hacer ahora, señor mío?
16Eliseo le dijo: —No tengas miedo. El ejército que lucha por nosotros es más grande que el que lucha por ellos.
17Entonces Eliseo oró y dijo: —SEÑOR, abre los ojos de mi siervo para que pueda ver.
El SEÑOR abrió los ojos del joven y el siervo vio que la montaña estaba llena de carros de fuego y caballos que rodeaban a Eliseo.
2 Reyes 6:15-17 PDT
Al leerlo es imposible no pensar en ese escenario donde estamos con un campus delante con tantos estudiantes y personal docente por alcanzar o ese nuevo trabajo con todos esos compañeros nuevos no creyentes a nuestro alrededor o quizás esa comunidad nueva a la que acabamos de llegar para levantar una misión, y en nuestros corazones con ese ánimo por ya iniciar, ese ánimo que se forjó al ir confiando en Dios, día tras día, semana tras semana, mes a mes, quizas año con año.
Pensando en las reuniones que vamos a ofrecer, los vínculos que vamos a formar, las personas que vamos a invitar a los campamentos, discipulados, reuniones etc…
Ir preparando un plan sobre qué herramientas vamos a usar, tanto digitales como materiales físicos, incluso pensando en fechas en las que podríamos hacerlo.
y de pronto voltea a nuestro lado ese nuevo creyente o nuevo discípulo que está ahí con nosotros sin lograr ver lo que nosotros vemos, no con nuestros ojos, sino con nuestro corazón.
Ese nuevo discípulo que quizás está temeroso o agobiado por todo lo que hay por dete de nosotros en la misión.
¿Como hago que el vea lo que yo veo?¿Cómo le transfiero esa visión de mi corazón al suyo?¿Cómo se envía por airdrop la visión a otra persona?¿O es por bluetooth? ¿¡Cómo!?
Bueno pues en este post te diré como.
Si ves a alguien haciéndolo con alguien más, esa persona tiene mucho potencial de convertirse en un líder de movimiento, si estás en una posición de liderazgo es algo que te debe interesar hacer.
En la porción ya mencionada puedes observar que es Eliseo quien está liderando la situación, a él es a quien el siervo va con la pregunta “¿Qué vamos a hacer ahora, señor mío?”
La respuesta de Eliseo a su siervo no es inventada por Eliseo, proviene del resultado de una profunda comunión con el Padre que ya había permitido a Eliseo ver las fuerzas que estaban de su lado.
Imagina que Eliseo no hubiera tenido una relación con Dios profunda e intencional, que estuviera solo ahí existiendo y que se presenta la misma situación, ¿Que crees que Él hubiera contestado?, posiblemente en lugar de una persona agobiada habría dos.
Una relación continua y profunda con Dios nos coloca más cerca de su corazón y nos deja ver lo que Él ve y desde la perspectiva desde donde Él la ve, desde ese lugar es desde donde se transmite la visión.
El este caso ante la petición de su siervo, Eliseo ora para que sea Dios quien “abra los ojos de su siervo” y aunque en el pasaje el siervo ve de manera literal a ejercito que les rodeaba, veo un paralelo cuando oramos que un discípulo adquiera la visión que queremos transmitirle.
Cuando esa oración da su fruto, esa persona comienza a ver que no estamos solos en la misión, si no que Dios está con nosotros en todo tiempo y hasta el fin del mundo (Mateo 28:20) y que contra eso no hay misión que no sea demasiado grande.
Objetivos claros y fáciles de entender siempre ayudarán muchísimo para poder compartir con otros y que se sumen a la misión.
En Abacuc Dios le pide a Abacuc que escriba la visión que Él le dará de una manera clara para que todo el que la lea sepa exactamente qué es lo que vendrá
Entonces el Señor me dijo:
«Escribe mi respuesta con claridad en tablas,
para que un corredor pueda llevar a otros el mensaje sin error.
Habacuc 2
La visión es aquello que queremos ver realizado, no en todos los casos podemos tener la misión, que es el cómo lo vamos a lograr cómo vamos a ver realizada la visión.
Sin embargo, tenerla misión lista ayuda a aterrizar la idea y da aun más recursos a las personas con las que queremos compartir la visión.
El ejemplo más práctico que podemos darte aquí en con nuestro mismo ministerio nuestra visión que responde a la pregunta ¿Que queremos ver realizado? es:
Movimientos en todas partes para que toda persona conozca a un verdadero seguidor de Jesucristo.
y la misión, que es el “¿Cómo lo vamos a lograr?” seguro te dejará un poco más claro el cómo llegaremos ahí.
Ganar, Edificar, y Enviar discípulos Cristocéntricos y multiplicadores en el contexto de una comunidad misional.
En Cru oramos por que tu ministerio sea fructífero, se sume al cumplimiento de la gran comisión, y puedas compartir de la mejor manera la visión con tus discípulos, socios y colaboradores que te rodean. Si deseas acompañamiento en un entreamiento donde podras ver mas caracteristicas de un lider no dudes en escribirnos.
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