La depresión no se siente como cualquier otra enfermedad.
La depresión me asustó. Siento que me ahogo en un abismo asustado. Me para mirarse en el espejo y no reconocerme o peor, odio a la persona que vi con miedo. Me para contemplar formas de matarme, porque me sentía tan desesperada en el miedo.
Soy amigo o familiar de una persona deprimida, ¿qué puedo hacer?
Para un cristiano, a menudo la depresión tiene dos lados: decaer constantemente y al mismo tiempo odiarte a ti mismo mientras decaes. Sientes que deberías dejar de orar.
Si no estás seguro si tu ser querido está realmente deprimido, o temes a dejarlos solos por lo que pueden hacer, aquí hay 3 cosas que tu amigo necesita de TI ahora mismo:
- Tu presencia. Tu amigo no necesita soluciones, consejos o discursos motivacionales. Necesita a alguien que se siente junto a ellos y abrazarlos mientras llora. Necesitan a alguien para hacerles preguntas y tratar de entender lo que está pasando. Puedes preguntar a tu amigo, "¿Cómo estás?" Pero una mejor pregunta sería "¿Cómo estás hoy?"
Enviar un texto. Chequear, a menudo. Orar por y con él/ella, si se siente bien con eso.
(Nota: si temes que tu amigo tienen a pensamientos suicidas, animale en amor a que busque ayuda profesional de un médico o un consejero inmediato.)
- Tu atención para sus necesidades físicas. La depresión es fisiológica, no sólo psicológico. Nunca olvidaré cuando mi amigos Nicole y Lautaro llegaron a mi apartamento con flores frescas y empanadas de pollo caseras. No preguntaron si mi esposo y yo necesitabamos cenar., sólo lo trajeron. "Tu no deseas cocinar cuando las cosas apestan," dijo Nicole.
Lleva a tu amigo fuera de la casa para pasear. Invitale a unirse a ti en algo que haría de todos modos.
- Paciencia. Probablemente no va ser divertido estar alrededor., su capacidad de socializar sentir imposible., las conversaciones cortas podría hacerle querer tirar de los pelos, pero necesitan saber que son amados.
La voz en la cabeza de tu amigo/a le decía qué debía hacer más y ser más, probablemente es parte de lo que causó su depresión. Necesita tu amable recordatorio de que incluso en su hacer nada de nada, es perfectamente aceptado para Jesús y amado por Él.
Amar a una persona deprimida es agotador y exigente. No hay ninguna solución rápida y fácil para mí, y mi esposo se siente a menudo incapaz de ayudar. Así que recuerda extender la gracia para ti mismo. Necesita amigos seguros que le ayudarán a procesar sus propios sentimientos.
Cuando estaba en el abismo, raramente sentí el amor o la presencia de Dios. Cuando estaba leyendo la Biblia o solo clamando a él, escuché su silencio y sentí su ausencia.
Pero me hizo experimentar su amor y cuidado a través de otros.
En los momentos más oscuros, seguí llorando, "Dios, ¿dónde estás?"
Pero ahora me doy cuenta, a través de mi esposo. Él estaba allí a través de amigos como Niccole y Lautaro.
Él estaba allí, y él estará allíí, contigo.
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Photo by Brittany Randolph/Flickr.
